lunes, 29 de abril de 2013

Ley de desindexación: ley de la jungla

A continuación reproducimos un magnifico artículo que nos envían los compañeros de la Sección de Seguridad Social:


Cuando no hay nada nuevo que decir se inventan una palabra (un término seudotécnico) un cientifismo interesado que intente ocultar la ingrata realidad que padecemos con su inestimable ayuda.
Los bancos que hemos tenido que rescatar indexando nuestros recursos obtienen unos beneficios, en tiempos de crisis general, enormes. A Belén Romana (la presidenta del "banco malo") la indexamos un salario en el mes de diciembre de 33.000€. El BBVA aumenta sus beneficios en un 72%, 1.734 millones de euros en el primer trimestre del 2012. Bankia, en el mismo periodo, también alcanzó unos beneficios de 213 millones de euros. ¿Indexaran sus beneficios en las arcas públicas? Estamos ante una pregunta retórica claro está.



La desindexación es otra neopalabra del neolenguaje neoliberal que significa recorte. El IPC ya no va a servir de referencia para nada. Las pensiones no se revalorizaran de acuerdo al IPC, no vaya a ser que, en palabras del Ministro Montoro, disfruten de “subidas alocadas”,tampoco los salarios públicos, que hace lustros que perdieron toda relación con el IPC, van a recuperar poder adquisitivo. Nadie, nada, tendrá relación con el IPC. El gobierno se hadesindexado de la realidad social y solo se indexa con la banca y con la dictadura del mercado.

Hay más de 6 millones doscientos mil parados, el 57% de la juventud está en paro, mientras tanto las jornadas laborales son más largas, nos obligan a jubilarnos más tarde, se inventan lo de la vejez activa para potenciar, aún más, la precariedad y la vergüenza de unos salarios de miseria...., pero nos invitan a mirar para otro lado ¿se puede?

La mentira se ha adueñado hace tiempo de las ruedas de prensa, de las entrevistas pactadas, de los medios afines (casi todos), del lenguaje políticamente correcto. Los beneficios bancarios, se ha dicho y escrito en muchas ocasiones, han sufrido una caída mientras los salarios, las pensiones, la vida, disfruta de un crecimiento negativo, su desfachatez no tiene límites y sus artimañas manipuladoras, tampoco.

Adornan y ocultan con "poesía" neo seudo economicista el terrorismo de unas medidas de sangría social que solo sirven para beneficiar a un 1% de la población. Estas medidas inhumanas, bestiales, campan a sus anchas en el BOE, en el consejo de ministros, en las reuniones de la Troika, en los foros del poder económico, por supuesto. Mientras a quienes semueven por mejorar la situación de la gente que padece las medidas de recorte de este sin sentido se les acusa de filo terroristas y otras lindezas.

Dan ganas de sacar a pasear las palabras que definen la catadura moral de la gente que mantiene obsesivamente esta insostenible situación, el diccionario es rico y contundente en este aspecto, pero nos falta espacio para contener tanta inmundicia.